Un día en Barcelona con Alea: Baño de hielo y cata de vinos.
Este año, ICE llegó a Barcelona y Alea lo celebró con su propio estilo. «Pasamos un día increíble con nuestros clientes y socios, y comenzamos este evento icónico con algunas experiencias únicas en nuestra ciudad natal», señalan desde Alea.
Comenzaron el día en su oficina con una sesión de baño de hielo, seguida de un delicioso desayuno.
¿Siguiente parada?. Las hermosas bodegas familiares Pere Ventura, donde se sumergieron en las tradiciones vitivinícolas de Cataluña. «Exploramos las cavas y, por supuesto, disfrutamos de un increíble maridaje de vino y comida», informan.
Para Alea se trató de algo más que negocios. Se trató de conexión, bienestar y disfrutar del viaje. «Estos momentos son donde las relaciones reales crecen y estamos emocionados por lo que viene».